Conceptos básicos para invertir en ETFs (2ª Parte)
En el artículo anterior sobre ETFs (Exchange Traded Funds), terminábamos indicando que uno de los elementos fundamentales de estos instrumentos es que permiten a los inversores individuales acceder a una combinación de diversificación/coste muy apelativa, partiendo de la idea de que diversificar el portafolio siempre es una práctica aconsejable, pero que la diversificación trae consigo costes operativos como un trade-off inevitable.
En este marco, vamos a centrarnos en este artículo en descubrir el funcionamiento de dos variedades específicas de ETFs: los apalancados y los inversos.
Los ETFs apalancados son usados por los inversores que desean exponerse a un índice (u otro subyacente) con un objetivo especulativo a corto plazo. Es decir, si el inversor espera que ocurra un movimiento de mercado significativo en el corto plazo, por ejemplo, que el índice S&P500 suba un 5% ante un resultado macroeconómico muy favorable, puede buscar exponerse al índice, pero que su rendimiento, en el caso de estar correcto, sea de un 10% sobre la inversión y no solo un 5%.
La verdad es que para esto se podrían usar derivados (como los CFDs o futuros, entre otras opciones), o también, desde un punto de vista más conservador y menos complejo, usar un ETF apalancado. De esta manera, podría comprar el ETF Direxion Daily S&P500 Bull 2X (ticker: SPUU:arcx), que lo que hace es replicar el doble del rendimiento diario del índice S&P500. Esto significa: si el índice sube un 0,9% durante un determinado día, este ETF apalancado subirá un 1,8%. Sobre una misma cantidad invertida de dinero, entonces, vemos que con el ETF apalancado obtenemos el doble del retorno. Obviamente, el riesgo en el caso de caídas también es el doble, ya que las caídas diarias del índice S&P500 también estarán duplicadas.
Esta posibilidad de apalancar los rendimientos se obtiene a un precio, lógicamente, que se origina del hecho de que el proveedor del ETF, Direxion en el caso del ejemplo, debe recurrir a instrumentos derivados para obtener el doble del rendimiento del índice subyacente, y dicha operativa implica complejidades y costes que se traducen en un precio operativo del ETF bastante superior al precio de un instrumento pasivo, que simplemente busca replicar un índice y no el doble o el triple de su retorno.
Por este motivo, la inversión en ETFs apalancados no suele ser de largo plazo, porque resulta poco eficiente en costes. Habitúan ser especulativa y de corto o mediano plazo. Continuando nuestro ejemplo del SPUU:arcx, el coste anual neto de administración de este ETF es del 0,67%, que es elevado si se lo compara con el coste de administración del SPY:arcx, por ejemplo, que replica al índice S&P500 sin apalancamiento, con un coste anual de tan solo 0,0945%.
En esta misma línea, también existen ETFs apalancados tres veces, por ejemplo el SPXL:arcx: Direxion Daily S&P500 Bull 3X, donde el inversor obtendría aún más exposición al retorno diario del índice S&P500. En este caso, el mayor apalancamiento ofrecido por el proveedor del ETF (Direxion) también se traduce en mayores costes de administración: 1,10% anual.
Otra estrategia para un inversor podría ser la de posicionarse en corto, es decir, invertir una cierta cantidad de fondos con el objetivo de obtener beneficios si el subyacente (por ejemplo, el índice S&P500), baja el precio. Esto significa obtener rentabilidad de escenarios bajistas. De nuevo, para esto se podrían utilizar los derivados, con su consiguiente coste y complejidad, o entonces, para ser más simples, utilizar ETFs inversos.
Consideremos el caso del Direxion Daily S&P500 Bear 1X (ticker: SPDN:arcx), el cual subirá un 1% si el índice S&P500 baja un 1% durante un determinado día, y viceversa. En la construcción de estos ETFs por parte de su proveedor también se recurre a derivados, por lo cual, como indicábamos antes, también son objeto de un coste de administración superior al de un ETF no apalancado ni inverso: 0.56% anual, en el caso del SPDN:arcx.
Corresponde indicar que los ETFs inversos también cuentan con versiones apalancadas dos y tres veces, por lo cual, además de posicionarse para obtener rentabilidad de escenarios bajistas, también es posible hacerlo en términos apalancados.
En próximos artículos continuaremos explorando las posibilidades que ofrecen los ETFs en términos de diversificación