A qué llamamos o qué es la inversión en value (valor) o growht (crecimiento).
Lo primero que tenemos que definir es a qué llamamos o qué es la inversión en value (valor) o growht (crecimiento).
Podríamos definir la inversión en valor como un estilo de inversión a largo plazo que consiste en comprar acciones e invertir en empresas infravaloradas que se consideran que tienen un potencial de revalorización o crecimiento.
Por lo tanto, a partir de esta definición sencilla de la inversión value vamos a tener en consideración que nuestra búsqueda se va a basar en empresas que a largo plazo tienen un potencial de crecimiento y que son compañías que cotizan por debajo de su valor contable y hay que esperar por lo tanto que a largo plazo los agentes de mercado reconocieran esa ineficiencia entre el valor contable y el valor en bolsa de la compañía en cuestión.
Warren Buffett popularizó esta manera de invertir siendo en la actualidad una estrategia de inversión muy popular entre los gestores, debido a que la premisa es buscar compañías con potencial de revalorización a largo plazo. Va a ser imprescindible analizar al detalle las empresas en las que se desea invertir para ver si en el largo plazo tienen o no potencial de crecimiento.
La inversión de crecimiento parte de la idea de que el factor más importante en una inversión no es el precio de adquisición de las acciones (tal y como se defiende la inversión en value), sino que lo importante es la capacidad de crecimiento de la compañía en medio y largo plazo. De esta forma, el retorno sobre la inversión vendrá determinado por la capacidad de la compañía de obtener tasas de crecimiento por encima de la media, y, por lo tanto, este crecimiento se verá reflejado en la cotización de la compañía.
Por lo tanto, los estilos de inversión value y growth parten de dos enfoques muy distintos a la hora de invertir.
Normalmente se identifica la inversión en valor con sectores con tasas de crecimientos menores y que cotizan con métricas de valoración más bajas, por ejemplo, sector financiero, consumo básico o telecomunicaciones. Por el contrario, se identifica a la inversión en crecimiento a sectores que cotizan en tasas superiores a la media siendo los sectores de la tecnología y consumo discrecional sectores más vinculados con la inversión en crecimiento.
Un gran número de estudios han demostrado que históricamente la estrategia basada en comprar compañías que cotizan con métricas de valoración más bajas que la media han obtenidos mejores resultados a medio y largo plazo, sin embargo, en los últimos 10 años los datos nos demuestran lo contrario.
Este gráfico nos refleja la mejor evolución en los últimos 10 años de la inversión en Crecimiento frente a la inversión en Valor.
Ambos estilos de inversión no tienen por qué ser excluyentes, aunque como ha quedado claro, son dos estilos de gestión muy diferenciados. Además, hay que tener en cuenta que una compañía pasará por distintas fases a lo largo de su vida como tal.
Por otro lado, a modo de curiosidad, hay que decir que Warren Buffet compró este año acciones de Amazon. En teoría una compañía que encajaría dentro de la filosofía de inversión en crecimiento, sin embargo, para algunos gestores como Carlos Cerezo de Belgravia Capital, al igual que Warren Buffett, defienden que la adquisición de Amazon puede pertenecer perfectamente a una compañía value.
Si como neófito preguntase a un gestor en qué invertir entonces, ¿value o growht? La respuesta sería diversificar en regiones, en estilo de inversión etc. Pero mi conclusión sería preguntarme como inversor qué busco, cuál es mi plazo de inversión, de que capital dispongo, y una vez respondidas dichas preguntas, elegiría aquella estrategia que mejor respondiese a dichas preguntas.